El parque de las aguas. De eso tan bueno ¿Sí darán tanto?
DIARIO VIRTUAL - AÑO 3 - AGOSTO DE 2008 - ISSN 1900 - 6225 - SANTIAGO DE CALI
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Todos a una, los habitantes del tradicional barrio de San Antonio se levantaron para rechazar el proyecto denominado Parque de las Aguas, que lidera la Cámara de Comercio de Cali.
El proyecto en maqueta y presentación es espectacular, pero de eso tan bueno ¿sí darán tanto?
El alcalde Jorge Ivan Ospina y el presidente de la Cámara de Comercio, gestor de la iniciativa dijeron que estará situado en el actual parque del acueducto, consta de 22 hectáreas, tendrá senderos peatonales, se podrá tener el agua en todos los sentidos, un pabellón que se llama planeta azul, donde funcionarán talleres didácticos e interactivos, que permitirán la investigación.
También se contará con un charco de las nutrias para los niños, que hace alusión de nuestros charcos tradicionales a los paseos de río. Este lugar tendrá 40 centímetros de profundidad para que ellos puedan jugar con el agua.
Pero esto no es todo lo que ofrecerá este parque, muchas otras cosas se encontrarán en este placentero lugar, este proyecto constará de cinco etapas que se pretenden tener terminadas en el 2010, pero se espera que tanto el sector público como el sector privado aporten para la realización de este maravilloso lugar.
La dirigencia comunal del sector alega que en el papel y en los labios de los funcionarios la iniciativa suena muy lindo pero lo único cierto es que va contra la ecología y el medio ambiente y contempla intervenciones arquitectónicas permanentes, que por ley no se pueden realizar.
El plan es agresivo contra “la vida y tranquilidad de todos los moradores de los barrios vecinos: El Peñón, El Mortiñal, Nacional, Normandía y San Cayetano,” alegan los vecinos, que realizaran una gran marcha el 12 de agosto, la cual contará con el apoyo del periódico La Razón.
Explican, además, que el programa pretende construir conjuntos de edificaciones en concreto. “Participarán muchas instituciones y empresas.” Las inversiones son superiores a los $ 50.000 millones. Se harán parqueaderos, se construirán edificios y se intervendrán los nacimientos naturales que tiene el parque.
La Junta Comunal no se opone al progreso, “pero de ninguna manera puede aceptar que a nombre de este progreso se destruyan la vida y la tranquilidad.”
Peligra la vidaEl progreso, dicen los líderes con admirable filosofía doméstica, debe tener como premisa principal el bienestar del ser humano, que “es vulnerado cuando la calidad de vida se destruye.”
“El solo hecho de levantar construcciones en concreto sobre terrenos vírgenes, que han albergado durante cientos de años una flora y una fauna nativas, es un atentado grave contra la vida,” argumentan.
Si hoy el barrio se queja por la proliferación de negocios que hacen difícil la vida de sus habitantes, ¿qué se podrá esperar de algo con unas dimensiones mucho más grandes?, se preguntan.
Con una extensión de veinte hectáreas, el parque de San Antonio es un entorno natural que debe ser protegido. Hoy necesita servicios públicos para los visitantes y vigilancia permanente.
Los residentes en el lugar proponen, en cambio, mejorar el equipamiento del parque, los senderos, la iluminación. También abrir el Acueducto, instalar bancas y hacer un encierro en barras de hierro. La idea es que los caleños puedan disfrutar del parque, pero sin intervencione scomerciales. El asunto es sencillo: Si quieren un negocio búsquenlo en otra parte. Compren un terreno, que no sea público, hay muchos en las zonas rurales y allí construyan su parque.
Sugieren, además, “remover las infames torres de energía que se encuentran detrás de la iglesia de San Antonio” y detener el creciente número de negocios en esa área.
Se duelen también de que en la idea participen entidades protectoras del medio ambiente, como el Ministerio del ramo y algunas agencias de cooperación internacional.
Campaña por el río
En vista de que sin el agua no podemos vivir, consideramos que la Cámara de Comercio debe promover una campaña para salvar cuanto antes a los moribundos ríos Cauca y Cali.
El presupuesto previsto para el proyecto de San Antonio, estimado en $ 50.000 millones, podría ser utilizado para descontaminar el caudal. O lo hacemos, o perecemos.
Dicen los quejosos que la Cámara de Comercio presenta el proyecto de San Antonio como opción de trabajo para algunas personas que viven en sectores marginados de los barrios Normandía o El Mortiñal.
Y añaden: “Como una oportunidad de negocios para empresas diversas. Como un excelente lugar de atracción para miles de personas. Y como un sitio administrado por una fundación privada. ¿Será eso lo que necesitamos nosotros?, se interrogan.
Los recursos mencionados servirían para iniciar un plan de descontaminación que nos involucre a todos. Tenemos que entenderlo: la situación de nuestros caudales es muy crítica.
LA RAZON tiene la certidumbre de que los directivos de la Cámara de Comercio tienen capacidad y condiciones profesionales para emprender la salvación de nuestros ríos.
Primero debemos cuidar nuestros recursos. Uno de ellos, tal vez el más valioso, es el agua. Hagámoslo ya, porque antes de cinco años estaremos arrepentidos de nuestra desidia.
La anterior información fue suministrada por la Junta de Acción Comunal.
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